La época dorada de John Mayall se centra en la segunda mitad de los años 60 donde debuta
con el disco en directo John Mayall Plays John Mayall (1965) en el que ya cuenta dentro de su
formación con John McVie al bajo.
Le siguen tres discos con su formación Bluesbreakers en los contará para cada uno de ellos con
un guitarrista llamado a ser un futuro exponente de la música británica. El primero en 1966,
Bluesbreakers with Eric Clapton, que propició las famosas pintadas de Clapton is God y el inicio
de una carrera llena de éxitos, tras conocer en la formación a Jack Bruce y crear la superbanda
Cream junto al recientemente fallecido Ginger Baker; a este le seguiría Hard Road (1967) con
un joven Peter Green que tras dejar la banda se uniría a otros dos exbluesbrakers, JohnMcVie y
MIck Fleetwood para formar Fleetwood Mac. Para acabar el año 1967 estrena Crusade con un
Mick Taylor que saltaría a la fama por ser el reemplazo de Brian Jones en los Rolling Stones.
Todavía tendrá tiempo en esta década para publicar ocho discos más, entre los que se
encuentran por importancia Blues from Laurel Canyon (1968) y The Turning Point (1969). El
primero se vio propiciado por el cambio de residencia a California, donde estuvo en contacto
con Cannet Heat, Frank Zappa, Jim Morrison, The Birds, Buffalo Springfield, The Eagles o Neil
Young.
En el segundo, como su nombre indica, se produce un punto de inflexión al realizar un
magistral disco en directo donde prescindió de la batería y de la guitarra eléctrica (salvo en
contadas ocasiones), para realizar un repertorio con suave orientación blues impregnado de la
cultura hippie. Dentro de disco encontramos uno de sus mayores éxitos, Room to Move.
Posteriormente se suceden los discos viajando desde el blues más clásico al jazz o al blues
rock, pero manteniendo siempre el sello compositivo de Mayall y su visión sobre los clásicos
del Blues.